Dave Sandford es un fotógrafo deportivo profesional con sede en Ontario, Canadá, cuya pasión por todo aquello que tenga que ver con el agua, lo llevó a pasar alrededor 4 semanas en el lago Erie, donde pudo capturar estas inspiradoras fotografías de poderosas y agitadas olas que parecen montañas líquidas que explotan en la atmósfera.
“Recientemente he visitado los Grandes Lagos, cerca de mi hogar en Ontario, Canadá. El que más me llamó la atención fue el lago Erie. En estos días oscuros, fríos y ventosos de otoño, los lagos se vuelven una masa de agua salvaje y traicionera,” dijo Sandford.
Durante este proyecto, Sandford dedicó 2 o 3 días por semana, conduciendo 45 minutos desde su hogar hacia la costa Norte del lago Erie, donde equipado con su cámara Canon EOS-1D X y sus objetivos de 400 mm y 70-200 mm, se quedaba hasta 6 horas diarias fotografiando las olas, soportando una temperatura variaba entre -2º y 14º Celsius, con ráfagas de viento que alcanzaban 60 + mph y las olas de casi 8 metros de altura.
Según escribió en Bored Panda: “En días como estos, la gente normal se aleja del lago, porque se vuelve vivo y muestra su verdadero poder. En días como ese es cuando no puedo esperar a llegar al lago y fotografiarlo.”
Para este proyecto, el clima jugó un gran factor. Normalmente los días eran oscuros y tormentosos, con nubes bajas de colocación y las olas que eran absolutamente monstruosas en forma y tamaño.”
“Ellas se forman muy rápidamente a diferencia de una ola del mar y son extremadamente erráticas, poderosas y explosivos.” Dijo a Fstoppers.
Vía: furiamag
Fotografía: Dave Sandford